Un potenciómetro se utiliza en circuitos electrónicos para ajustar de forma variable la resistencia eléctrica. Consiste en un elemento de resistencia, que a menudo se diseña en forma de rascador giratorio y puede moverse entre las conexiones del potenciómetro. El valor de la resistencia del potenciómetro puede modificarse moviendo la aguja.
Los potenciómetros se utilizan en muchas aplicaciones diferentes, como controles de volumen, controles de brillo para pantallas, divisores de tensión en circuitos analógicos o como elementos sensores para medir movimientos mecánicos.
Una de las ventajas de los potenciómetros frente a otros tipos de resistencias, como las fijas, es su capacidad de ajuste variable. Esto permite adaptar con precisión el valor de la resistencia a los requisitos del circuito. Los potenciómetros permiten un ajuste infinitamente variable de la resistencia, mientras que las resistencias fijas sólo tienen valores discretos.
Otra ventaja es su sencillo manejo. Los potenciómetros se pueden girar o mover fácilmente para ajustar el valor de la resistencia. En comparación, las resistencias fijas requieren soldadura para sustituirlas.
Los potenciómetros también ofrecen una forma rápida y sencilla de controlar o regular señales eléctricas. Cambiando el valor de la resistencia, se puede ajustar el valor de la corriente o la tensión en el circuito.
En resumen, los potenciómetros son versátiles en los circuitos electrónicos y ofrecen la ventaja del ajuste variable, que los diferencia de otros tipos de resistencias.